El Pasado Perdido: Capítulo 3. El extraño baile

El extraño baile

28 de Noviembre.

Era el día de celebración de Daphne, ya que pasó un año desde que la coronaron reina. Estoy muy orgullosa de ella. Yo me fui al balcón a apreciar las maravillosas vistas de Domino, pero todo cambió de repente. Todo se volvió blanco. Pero luego volvió a la normalidad, o eso creía.

Oí unos gritos que venían del salón real. Corrí con velocidad para saber qué era. Y como me temía. Era él. Yo retrocedí y una señora corriendo, aterrada, me traspasó. ¿Era un sueño?

-¿Dónde está Aurora?- Dijo Sin Rostro apuntando a Bloom con una espada.

-¡No te lo diré! ¡Primero di quién eres!- Dijo Bloom seria.

-Soy alguien que tú conoces…- Dijo bajando la espada.

Entonces solo ocultaba su rostro… Necesitaba saber quién era. Alguien que ella conoce… Las Winx no podían ser ya que estaban todas allí, y Daphne… Oh, oh… ¡Daphne no estaba! Busqué por todo el palacio, por los espejos reales, por los dormitorios, en los balcones, pero no la encontraba…

-¿A-Alguien que yo conozco?- Oí la voz de Bloom, asustada.

-¡¡Dime dónde está Aurora!!-

-Me está buscando…- pensé. Me di cuenta de que todo esto era una visión. Era una visión de hoy. En el baile. Vi a mi otro yo, dando cara contra Sin Rostro…

-¿Me buscabas a mí?- Dije, o dijo ‘’Aurora’’.

-Justo a ti…- Y soltó una risa malévola, acercándose a ‘’Aurora’’.

-¡Magic Winx, Dimentix!-

-(…) ¡No puedo transformarme!- Dijo ‘’Aurora’’ asustada.

-¡Nosotras tampoco!- Le oí decir a Layla.

Sin Rostro soltó una risa malévola y ‘’Aurora’’ retrocedió. Lo único que podía hacer eran rayos, bolas de fuego e invocar a un gran dragón de fuego, pero eso para él sería como una pluma dirigiéndose levemente a él.

‘’Aurora’’ miró a su izquierda. Bloom no estaba. Se asustó. Primero Daphne, luego Bloom, no podía transformarse… Yo deseaba atacar, pero era como invisible, aire que corría por el salón. En un abrir y cerrar de ojos, en el salón solo quedaron Sin Rostro, ‘’Aurora’’ y las Winx, que no podían hacer nada. Ahora esto era entre ‘’Aurora’’ y Sin Rostro.

-¿Qué quieres de mí?- Dijo ‘’Aurora’’ asustada.

-Tu vida.- Dijo sacando poco a poco su espada.

-¡Nunca!-

-Vale. Si no me la das…- sacó su espada.- ¡La conseguiré por mí mismo!- Y seguido de esto lanzó su espada contra mí. Entré en el mundo real.

-¡Aurora! ¡Aurora!- Me llamaba alguien.

-¡Aurora!- Noté que me agitaban. Ese olor tan mágico… ¡Era Bloom!

-Eh? ¿Qu-Qué? ¿Qué pasa?- Dije asustada por la visión. Miré mis manos. Seguía viva. ¿Lo de la visión quiere decir que voy a morir? ¿Por qué no pude ver más de aquello? ¿Y dónde estaba Daphne? No apareció ninguna vez en la batalla. Y Bloom…

-¡Estás bien!- Entré en mí y la abracé.

-¿Cómo que estoy bien? ¡Pues claro! ¿Qué te ha pasado?-

-Ah, nada. Una visión, o una pesadi... Un sueño.- murmuré.- No tienes por qué preocuparte. Bien, ¿qué me he perdido? ¿Y Daphne?- Dije cambiando de tema. No quería que sospechara.

-No lo sé.- murmuró.- Estoy buscándola por todo el castillo pero ni rastro de ella, se va a perder la sor… Bueno, nada. Miré en el balcón y te encontré en el suelo.- Dijo ayudándome a levantarme.

 -Ah.- No estaba en la visión, no estaba en el mundo real, y cada vez que me encontraba con Sin Rostro tampoco estaba… Qué extraño…- Supongo que habrá salido fuera.-

-¿Tú has visto algo en el balcón? ¿La has visto o algo?- Dijo asomándose para ver si veía a Daphne, pero nada.

-Ah, no.- murmuré.- No te preocupes, volverá.- Pasé mi brazo por su cuello y nos volvimos al salón.

-Ah, yo voy al salón, necesito ver una cosa. ¡No vengas!-

-¡Espera, no! Debo ir contigo.- Tal vez si iba con Bloom podía cambiar el futuro e impedir que Sin Rostro volviera, tal vez…

-No hace falta que vengas.-

-¡Que sí!-

-¡He dicho que no!- Y salió corriendo.

-¡¡Bloom!!- Corrí tras ella. Llegué al salón. Las luces estaban apagadas.

-¿B-Bloom? ¿Chicas? ¿Hay alguien?- Dije asustada, andando poco a poco. Mi pierna rozó un globo. ¿Un globo?

-¡¡¡Sorpresa!!!- Aparecieron todos de repente con matasuegras, confeti, y globos.

-¿Qué- Qué está ocurriendo?- Dije asombrada.

-¡Es tu cumpleaños!- Dijo Stella riendo.

-¿Mi… Mi cumpleaños?- ¿Mi cumpleaños? ¿De verdad? ¿Cómo es que no sabía nada? ¿No debería de estar aquí Sin Rostro? ¿Y Daphne?

-¿Y Daphne?- dije susurrándoselo a Bloom.

-Ahora viene.-

-¿Pero sabes dónde está?- Dije sonriendo.

-¡Pues claro!- Dijo riendo.

-¡Mentirosilla!- Y me abalancé a ella de broma. Todos nos reímos.

-¿Los especialistas no han venido?-

-No sé, dijeron que vendrían.- Dijo Bloom viendo su reloj.

-¿Quieres ver a Marc?- Dijo Stella riendo, pegándome un codazo.

-¡Stella!- la empujé, riendo.- Pues no. -Bueno vale, si…- susurré.

-¡Oooohh! ¡Qué boniiiitooo!- Dijo Stella riendo y saltando. Yo la empujé.

-Iré a ver si han llegado.- Y salí. Vi a Daphne.

-¡Daphne!- Dije acercándome a ella. -¿Dónde estabas? ¡Te has perdido la sorpresa!- Dije acercándome a ella, más que antes. Ella se dio la vuelta bruscamente y puso sus manos atrás.

-Ah-ah. ¡Hola!- Dijo con una sonrisa falsa.

-¿Qué escondes?- Dije acercándome para ver qué era.

-¡¡Nada!!- Dijo dando un paso atrás. –Vamos a la fiesta, ¿no? Al fin y al cabo es tu fiesta, no puedes faltar.-

-Si…-Dije extrañada. Ocultaba algo… -Bueno, ¡vamos!-

-S-Sí.- Salieron unas chispas de detrás y puso sus manos delante, no tenía nada.

-¡Tú primera!- Dije amablemente.

-¡Ja, ja, ja, vale!- Dijo haciendo una reverencia de broma y entró en el salón. Vi una mancha de sangre.

-¿Q-Qu-Qué?- Dije retrocediendo, muy asustada. -¿D-Daphne es… Sin Rostro?-

No podía creerlo. ¡¡Daphne, mi hermana, era Sin Rostro!! ¡¡Quería matarnos!! ¿De verdad que es ella?

-¡Vamos, Aurora!- Me llamó Daphne.

-S-Sí… E-estaba viendo una cosa, nada más.- Me di la vuelta pero no podía dejar de ver esa mancha de sangre.

-¿Ocurre algo? ¿Qué hay ahí?- Dijo acercándose, bajando poco a poco las escaleras.

-¡Nada! ¡Vamos, entremos a la fiesta!- Dije ocultando aquella mancha de sangre que había en el suelo. Yo tenía en mi rostro una sonrisa, pero no una cualquiera. Una falsa, de terror. ¡Mi propia hermana me quiere matar! ¡A mí y a su otra hermana y a las mejores amigas de sus hermanas! ¿Suena complicado, verdad? Pues no es de risa, porque esto es difícil de creer. Primero mis padres mueren, luego mi hermana resulta ser una asesina… ¡Qué locura, por dios!

Entré, vi a todo el mundo bailando feliz. Vi a Bloom con Sky, Stella con Brandon, a Marc… ¡Ey! ¡Por fin los especialistas llegaron! ¡Y no me di cuenta! Ah, claro, estaba con mi hermana asesi… Con Daphne.

-¡Aurora, hola!- Marc me saludó, y yo me acerqué a él.

-¡Hola Marc! No te veía.- Saludé.

-No es nada. ¡Woow! Vas… ¡Vas preciosa!- Me miró de arriba abajo.

Me sonrojé.-¡Gracias! Tú también vas muy guap… eh.. ehm…-

-Mejor cambiamos de tema.- Dijimos a la vez. Nos miramos y nos empezamos a reír.

-¿Qué pareja más mona hacen, a que sí?- Le dijo Stella a Bloom.

-¡Sí que la hacen!- Dijo Bloom riendo.

-Te veo preocupada. ¿Ocurre algo?- Me dijo preocupado Marc.

-¡No, tranquilo! No pasa nada.- Sonreí.

-Me alegro.- Sonrió.-Ah, Aurora, tengo, te-tengo que decirte algo, enseguida vuelvo.- Dijo nervioso Marc. Se fue a una esquina, ahí le esperaba Sky.

-Bien, como hemos acordado, ¿de acuerdo?- Dijo Sky calmándole.

-Estoy muy nervioso.- Dijo Marc muy nervioso.

-Tranquilo, solo serán unas cuantas palabras y una respuesta. ¡Adelante!- Dijo Sky empujando a Marc. Marc se dirigió a un pequeño escenario, e hizo que Aurora subiera también.

-¿Qué ocurre?- Dije nerviosa.

-Ahora mismo lo verás.- Dijo agarrándome de la mano.

Marc cogió un micrófono.

-¡Atención todos! Debo decir algo. En medio de la multitud era un poco raro decirlo, por eso lo diré aquí, que es mejor…- Dijo nervioso Marc. Sky le hizo una señal de ‘’¡¡Ve al grano!!’’.

-Ok, voy al grano.- Todo el mundo estuvo en pleno silencio, y noté a las Winx nerviosas. ¿Pero qué ocurre? Marc se arrodilló y sacó una cajita. Oh… 

-Aurora Peters… ¿Quieres… Quieres casarte conmigo? - Dijo sonriendo.

-¡¡¡¡Sí!!!!- Dije muy excitada. ¡¡Me pidió matrimonio!!

Todos nos aplaudieron y nos dimos un gran beso. Empezó a sonar la música y… ¡Todos a bailar! Stella nos puso un traje Disco, e hicimos un gran concierto Winx! Pero…

Al terminar, no vi a Daphne. Subí al balcón y recibí un hechizo. No sabría decir si era un hechizo o un golpe en la cabeza, pero me lo dio alguien.

Aparecí de nuevo en el balcón y vi a una chica, rubia, con mechas rubias en las puntas…

Gracias a BrokenAmyLee de DeviantART

(¡Imaginad que es rubia con mechas rosas! XD)

Wow, era realmente hermosa.

Pero apareció Sin Rostro, o debería decir… Daphne…

-Hola, Aurora…- Dijo Sin Rostro, o Daphne.

-Hola… Daphne.- Dije levantándome del suelo.

-¿¿Cómo me has descubierto??-

-Secreto, secretito…- Dije en tono burlón.

-Gr…-

-¿Quién es esta chica?- Dije señalándola. Ella ni se inmutaba.

-¿No reconoces a tu hija?- Dijo con una risa malévola.

-¿Mi-Mi hija?- Dije asombrada. 

-¿Ves a esta chica? Pues pronto la verás en la tumba. La mataré.- Soltó una risa malévola.

-¿¡Qué?! ¡¡No!!- Y le lancé una bola de fuego. Esta vez no pudo defenderse con la espada y acabó en el suelo. Le hice unas cuantas heridas. ¡No podía permitir que matara a mi hija!

-¿¡Por qué quieres matarnos?! ¡Somos tus hermanas y amigas!- Dije enfadada.

-(…)-

-¡¡¡Contéstame!!!-

Oía voces de fondo y conseguí despertar, Al abrir los ojos me encontré a Daphne con heridas, en el suelo. Mucha gente se acercó y me miraron raro.

-Oh, no…- dije retrocediendo. -Yo he hecho esto… ¡Yo he dañado a mi propia hermana! Pensé. Siempre se repetía la misma frase en mi cabeza:

Di adiós a la inocencia, Aurora…