CAPÍTULO 1:
¿Sabré mantener este secreto?
P
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ozoblanco es una ciudad que se
encuentra en la comarca de Los Pedroches, en Córdoba, Andalucía (España).
Yo era una niña de
quinze años, de cabellos rojizos, con flequillo, y de chispeantes ojos
azules. Estaba acostada en la cama, porque era ya hora de dormir. Y estaba
leyendo un libro de hadas, hasta que me quedé profundamente dormida. Al rato, desperté
de un sueño, en el que una ninfa llamada Daphne, me decía: «¡Bloom!, eres un hada, debes buscar en tu
interior, saca el hada que llevas dentro, ve a la Dimensión Mágica, porque este
es tu destino. Ve a la Escuela de hadas Alfea, allí te enseñarán a ser un hada». Desperté y sentí algo en mi
interior. Creía que todo era imaginación mía, ya que el libro era de hadas.
Tras días de extrañez
pude contarles este sueño a mis padres, Marion y Oritel, que por siempre me han
apoyado. Ya me sentía liberada, pero había algo que me incomodaba, y era no
contarles esto a mis mejores amigos.
Por la mañana me
levanté para ir al instituto, había quedado con mis amigos como todas las
mañanas a las 8 en la cafetería Café–Bar que hay cerca de mi casa. Como
siempre, allí estuvieron, en la puerta, y nos marchamos todos para el instituto.
Éramos Stella, la más estilosa de todas y mi mejor amiga, tiene los ojos
marrones y es de cabellos rubios, y con flequillo; Musa, tiene los ojos azules
y el cabello azulado, con flequillo, ella ama la música; Andy, tiene los ojos marrones
oscuros y el pelo negro, con flequillo hacia el lado; y, Riven, tiene el pelo
de color magenta oscuro, echado hacia arriba y con flequillo hacia los lados, y
los ojos negros. Llegamos al instituto y allí nos encontramos con Flora, ella
es de cabellos morenos, con flequillo hacia los lados, tiene los ojos verdes y
le encanta la naturaleza; Roxy, con cabellos rosados y ojos violeta, le
encantan los animales; Timmy, con pelo anaranjado, con el flequillo hacia el
lado, y ojos marrones, le encanta todo lo que tiene que ver con la tecnología;
y Brandon, que tiene el pelo castaño, con flequillo hacia el lado, y ojos marrones.
Allí todos nos saludamos, viene el profesor y abre la puerta de clase, y todos
entramos.
Cuando han pasado ya
dos clases, llega el recreo, y nosotros aprovechamos para almorzar y para
hablar. Yo me reúno en los recreos con Stella, Flora, Musa, Roxy, Andy,
Brandon, Timmy y Riven, mis mejores amigos.
–¡Esto es increíble!
–dijo Timmy– La profesora de lengua, lleva ya días sin venir.
–Ya, es un milagro
–comentó Stella.
–Mejor para nosotros
–continuó Musa–, así podemos hacer las tareas que nos manden.
–Sí, pero –dije–,
¿qué creéis le pasará?
–Ni idea –responde
Riven.
–A lo mejor está
enferma –continuó Andy.
–Pues será eso –le
siguió Brandon–, pero por el momento no sabemos nada.
Estaba a punto de
acabarse el recreo cuando llegó Roxy con una bolsa de Patatas Lays, que
había comprado en la cantina. Nos saludó, tocó el timbre y fuimos a nuestra aula.
Aún teníamos tiempo de charlar mientras venía el profesor de sociales. Después
de esta clase, y de otra, viene el siguiente recreo en el que discutimos lo que
hay que estudiar. Todos decíamos que la profesora de naturales exageraba con lo
de estudiar a diario, aunque era verdad. Sonó el timbre y nos esperan otras dos
clases más. En matemáticas, Stella se durmió en clase, estaba recostada hacia
atrás y Riven que se sienta al lado de Brandon, le intentaba meter bolitas de
papel en la boca. Y Brandon no paraba de decirle que pare, y resultó gracioso
por que la profesora acabó regañándoles a los tres. A Stella, por dormir en
clase; a Riven, por llenar el suelo de bolas de papel; y a Brandon por interrumpir
la clase. Se termina el instituto por hoy, como siempre voy acompañada de mis
mejores amigos. Llegué a casa y me dijo mi madre que ya había llamado al número
de la Escuela de Alfea, y que tenía clases para el próximo curso.
–Pero, ¿cómo has
sabido su número? –le pregunté.
–La abuela me ha dado
un móvil que había heredado su bisabuela, y que no sabe cómo ha aparecido ese
número ahí, pero, bueno, es lo mismo, ya he llamado, empiezas en septiembre –me
respondió mi madre y descubrí que lo que me dijo Daphne era verdad.
–¿Cómo? –pregunté confusa.
–Tienes que ir a Alfea.
–¿Y dónde está eso?
–Alfea está en otro
planeta, no en La Tierra –me aclaró mi madre.
–¿En dónde, en Marte?
–No –dijo riéndose–,
en Magix, está en otra dimensión.
–¡¿Qué?! –dije
sorprendida– , ¿y qué voy a hacer con mis amigos?, ¿cómo se lo explico?
–Tú los conoces mejor
que yo, pero creo que podrías decirles que te cambias de instituto y de país.
–Y en vacaciones,
¿qué?, son mis amigos querrán verme.
–Pues vendremos a
hacerles una visita.
–Ellos van a querer
saber donde me voy a ir, y yo ¿qué?, me invento el país, ¿y si me hacen una
visita sorpresa?, no estaré allí y no tendremos casa –dije algo alterada.
–Mira, vamos a ir a
Magix y allí viviremos. Ya encontrarás de aquí a que termine el curso alguna
excusa.
–Pues estamos a 12 de
junio, yo no te digo nada.
–Bueno, y yo que
quieres que haga.
Después de un día agotador,
fui a mi cuarto y me quedé profundamente dormida.
CONTINUARÁ
¿Qué ocurrirá con los
amigos de Bloom? ¿Logrará inventarse alguna excusa para que no descubran su
secreto o decidirá contárselo? ¿A quién se lo contará primero?
DESCÚBRIDLO EN EL
PRÓXIMO CAPÍTULO
5 comentarios:
Genial!!!! Me gusta mucho, mucho
Quiero segui leyendolo...
Espero el proximo capi
Besos♥
Genial!!!! Me gusta mucho, mucho
Quiero segui leyendolo...
Espero el proximo capi
Besos♥
esta genial. Es tu propia version de las winx club. ;)
¡abrazos mágicos!
GENIAL !!! yo tenia una corazonada de que daphne se lo contaria a bloom ! siguela esta muy buena! yo esperaba tanto que iniciara esta nove !
siguela , saludos desde Chile!
atte
-StellaSolary
¡Muchas gracias a todos y todas por vuestros ánimos!
Besos, Flora Winx Club All
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