SBL Temporada 1 Capítulo 2: Un nuevo día

CAPÍTULO 2:

Un nuevo día

T

uve un sueño en el que aparecía otra vez, esa misteriosa ninfa, llamada Daphne, y me dijo: «Son tus amigos, Bloom». Desperté con sobresalto, fui a la cocina a por un vaso de agua para despejarme un poco. Miré la hora y eran las siete de la mañana, pronto tenía que vestirme para ir al instituto, así que me vestí, y salí de casa a las siete menos diez, y aproveché los diez minutos que me sobraban para desayunar en el Café–Bar. Desayuné una taza de chocolate y un croissant. Estaba delicioso, tanto el croissant como el chocolate. No era la primera vez que iba a desayunar allí, una vez cuando no me dio tiempo desayunar, al ir allí, compré un croissant y me lo comí por el camino.

Era 13 de junio, la mañana se pasó rápido. Era por la tarde, cuando le dije a mi madre que iba a ir a comprar unos recambios que me hacían falta para mi archivador. De camino hacia la copistería, pensé en que debería tener un diario en el que podría escribir todo lo que me está pasando. Cuando llegué a la tienda, vi uno muy precioso, y me lo compré, junto con los recambios. Al pagarlo la dependienta de la tienda me dijo:

–Este es un ejemplar único, guárdalo con mucho cariño.

–Sí, pero, ¿por qué? –le pregunté.

–Es mágico –dijo la dependienta y me quedé extrañada–, bueno, es decir, no es que sea mágico, pero sí se abre mágicamente.

–¿Y cómo?

–Dentro va un collar que lleva dos llaves. Esas llaves no las tienes que introducir la llave dentro del candado, cuando las pasas por delante del diario, el candado se abre.

–Ah sí –me volví a quedar asombrada.

–Muchas de las clientas que han querido comprarlo, decían que eso era una tontería, y que no merecía la pena comprarlo, ya que es caro.

Lo compré y me despedí de ella. De camino a casa, me encontré a mi mejor amigo. Siempre estoy con él en vacaciones, cuando paso todo el verano en un camping de playa. Él tiene mi misma edad, pero no va a mi mismo instituto. Tiene el pelo rubio, con flequillo hacia el lado, y los ojos azules, es supersimpático.

–¡Bloom! –me saludó.

–¡Sky!

–¡Cuánto tiempo! ¿Qué tal estas? –le pregunté.

–Genial, ¿y tú?

–Bien –le dije con un poco de melancolía.

–¿Te ocurre algo?, porque normalmente no estás bien, sino genial o de maravilla.

–No puedo aguantar más este secreto. Vas a ser el primero en saberlo –dije desesperada.

–¿Saber qué? –preguntó preocupado.

–No se lo he contado a nadie excepto a mis padres. Y como eres mi mejor amigo…

–Puedes decirme lo que sea.

–Vale, allá voy. Soy un hada.

–A ver que me aclare ¿eres ¡qué!? –dijo confundido.

–Sabía que no tenía que haber se lo contado a nadie.

–No es por nada, pero es que estoy un poco confuso.

–Ven te lo explicaré. Vayamos al parque.

Llegamos al parque y allí nos sentamos en un banco. Y yo se lo conté todo, incluso lo de la escuela.

–¿Y vas a ir?

–Sí, tengo que ir me lo han dicho mis padres.

–¿Y dónde está?

–No te lo puedes imaginar. En la Dimensión Mágica –le dije, y él se quedó extrañado.

–¿Y eso dónde está? No hay nada que se llame así.

–Así me quedé yo cuando me lo dijo mi madre –le dije entre risas–. No está en nuestra galaxia, sino en otra, y se llama la Dimensión Mágica.

–¿Eso significa que no volveré a verte nunca?

–¡No!, sólo estarás si verme… –hice una pausa y dije con tristeza:– …no lo sé.

–¡¿Qué?!

–No me lo ha dicho –dije.

–Pero, ¿por qué?

–Tengo que irme –dije levantándome del banco.

–Espera, ¿cuándo te vas? –se levantó él también.

–En septiembre. Adiós –le di un abrazo y me fui.

–Adiós –dijo deprimido y a la vez sonrojado, y se volvió a sentar en el banco.

Al llegar, mi madre me preguntó que porqué había tardado tanto y le dije que porqué me había encontrado con Sky, que se lo había contado, y se había quedado extrañado, pero lo había comprendido. Fui a mi cuarto y abrí el diario y vi que era verdad lo que decía la dependienta. Y me quedé alucinada. También   había un bolígrafo que iba dentro de diario, era de tinta azul y las páginas del diario era de color lavanda. Y empecé a escribir:

«14 de junio de 2014. Querido diario:

Me llamo Bloom, tengo 16 años. Mis mejores amigos son: Stella y Sky, los primeros; y Flora, Musa, Roxy, Andy, Brandon, Timmy y Riven. Mis padres son Oritel y Marion. Me encanta comer pizza con mis amigos, quedamos muy a menudo, bueno y ya te iré contando más cosas conforme pasen los días, jajajaja. Y ahora viene algo muy raro e interesante al mismo tiempo:

Lo que me está pasando no es nada normal, la otra noche tuve un sueño. En él aparecía un hada diciéndome que yo soy un hada, que debía buscar en mi interior, que saque el hada que llevo dentro, que vaya a la Dimensión Mágica porque ese es mi destino. Me dijo que tenía que ir a la Escuela de hadas Alfea, porque allí me enseñarán a ser un hada. Yo no entendía nada hasta que se lo conté a mis padres. Mi madre ha llamado a la Escuela de hadas Alfea, e iré allí en septiembre. Hoy se lo he contado a Sky, mi mejor amigo, me junto con él cuando voy de vacaciones a un camping de playa. Se ha quedado algo extrañado, pero lo ha comprendido. Aún no se lo he contado a mis otros mejores amigos, y tampoco sé cómo hacerlo.»

Sonó mi móvil: <<We're back so listen up, because we've got something to say, fasten your seat belts now, we're gonna take you to a place…>>, era Sky, y lo cogí:

–Dime.

–Bloom, he estado pensando en lo que me has dicho y a lo mejor podría irme contigo allí, a vivir.

–¡Eso es una locura! ¿Tú no se lo habrás dicho a tus padres?

–¡No!, ¿digo que si hay alguna escuela por allí que no sea de hadas?

–Espera un momento –estuve unos segundos pensando.

–¿Bloom? ¿Sigues ahí? –le colgué

Fui y cogí el teléfono, y llamé al número de Magix. Sé cual es porque la directora de Alfea se lo dio a mi madre. Tardé como quince minutos en preguntarle unas cosas e ir apuntando. Y volví a llamar a Sky, tenía dos llamadas perdidas de él.

–He llamado a Magix por teléfono lo que tú me has dicho y me han dicho que hay cinco escuelas en Magix, ‘’Escuela de hadas Alfea’’, ‘’Escuela de brujas Torre de Nubes’’, ‘’Escuela de especialistas Fuente Roja’’, ‘’Colegio de Magix’’ e ‘’Instituto de Magix’’ –le leí–. Podrías ir a la de especialistas, allí sólo van chicos o al instituto de Magix, que es mixto.

–¿Qué es eso de los especialistas?

–Es una escuela en la que estudias lucha. Todos los especialistas llevan un traje azul y una capa azul oscuro. Cada uno tiene un arma propia.

–Perfecto.

–Sí, ¿y a tus padres qué les vas a decir?

–Ya lo tengo todo pensado, le diré que voy a ir a otra escuela que hay que quedarse a dormir allí y que está en otro país y que vendré a visitarles en vacaciones, ¿si es que allí tienen vacaciones, claro?

–Claro, ¿qué es un mundo sin vacaciones? Iré a preguntárselo a mis padres –no le colgué.

–¿Bloom?

–Dicen qué si tus padres te dejan, sí, sino, no. ¿Sky? –creía que me había colgado, pero no fue así.

–¡Sí!, ¡sí me dejan! –dijo entusiasmado.

–¡Genial! Bueno, ya hablaremos sobre esto mañana. Me llaman para cenar.

–Mañana al salir del instituto te veo.

–Vale, adiós.

–Chao.

«Bueno, diario, creo que tendré compañía, ¡Sky se viene conmigo! Se lo ha dicho a sus padres y dicen que sí, bueno no le ha dicho la verdad, le ha dicho que se va ir a otra escuela de esas para dormir en ellas, que está en otro país y que vendrá a visitarles en vacaciones. ¡Esto es genial! Excepto que aún no se lo he contado a mis otros mejores amigos. Bueno es hora de cenar así que mañana hablamos.»

CONTINUARÁ

¿Les contará Bloom a sus amigos su secreto? Y Sky, ¿qué hará para ayudarla?

DESCÚBRIDLO EN EL PRÓXIMO CAPÍTULO